Flamencas por derecho

Mujeres que han dejado su impronta en la historia del flamenco

Flamencas por derecho - Mujeres que han dejado su impronta en la historia del flamenco

Trini Ramos, de la Alameda a Nueva York (III)

Después de cuatro meses en cartel en el London Pavilion, la revista The Fun of the Fayre sigue siendo considerada “uno de los espectáculos más inteligentes y entretenidos que se pueden ver” en la capital británica (Staffordshire Advertiser, 4-2-1922) (1).

Trini Ramos (The Sketch, 9-11-1921)

Trini Ramos (The Sketch, 9-11-1921)

Destaca especialmente el cuadro ‘The Mirror of the Fayre’, en el que aparece un gran espejo de luz del que surgen cuatro representaciones diferentes de la hermosura femenina. Una de ellas, “‘Sevilla’ es representada por la maravillosa Trini, una joya española de encanto y belleza, que canta y baila de un modo fascinante” (Staffordshire Advertiser, 4-2-1922) y brilla con luz propia en sus “números con castañuelas” (The Scotsman, 12-1-1922).

Belleza versus talento

La extraordinaria hermosura de Trini Ramos no sólo tiene trastornados a los británicos, sino que incluso genera debates al otro lado del océano. De hecho, varios diarios estadounidenses publican un reportaje titulado “La chispa española que comenzó una guerra de belleza”, en el que se acusa a los representantes de discriminar a las artistas británicas en favor de las foráneas, por un simple criterio estético.

Por su parte, Cochran se defiende alegando que “llevó a Trini a Londres porque era la mujer más bonita que había visto nunca y no porque fuera española” (The Sunday Oregonian, Portland, 29-1-1922) (2).

Trini Ramos junto a Joan Clarkson, una de sus compañeras en The Fun of the Fayre (The Sketch, 22-2-1922)

Trini Ramos junto a Joan Clarkson, una de sus compañeras en The Fun of the Fayre (The Sketch, 22-2-1922)

Sin embargo, aunque no se puede negar que su físico le ha abierto bastantes puertas, Trini Ramos es mucho más que una cara bonita, y lo demuestra con cada paso que avanza en su carrera. Por ejemplo, una de las novedades que se incorporan a la revista The Fun of the Fayre, en mayo de 1922, es el número ‘Esperanto’ (3), en el que la sevillana interpreta una canción en inglés. Según las críticas, parece que no se le da nada mal:

Trini […] ha conquistado ahora las dificultades de nuestro idioma, pues aparece en un papel de habla inglesa y canta ‘The Language of Love’ con el Sr. Walter Williams. Este atractivo nuevo número representa las dificultades de una chica extranjera que aprende inglés; pero, dado que su nombre es Esperanto, y que el idioma del amor es el mismo en todos los países, lo hace bastante bien” (The Sketch, 10-5-1922).

Poco después, de la mano de Cochran, la “guapa y talentosa bailarina” (The Scotsman, 13-6-1922) vuelve a pisar las tablas del London Pavilion para participar en un programa de variedades, en el que no sólo canta en inglés sino que además interpreta algunos bailes típicos del país británico. También figura en el cartel el bailaor Vicente Escudero. Las críticas ponen de relieve el talento y el esfuerzo de la joven española:

“Uno de los atractivos principales de la primera parte es el cautivador número de canto y baile de Trini, que tiene la oportunidad de demostrar que es una artista inteligente además de ser ‘la chica más bonita del mundo’. En su actuación se intercalan algunos de los principales bailes españoles interpretados por Escudero, con su guitarrista” (The Stage, 15-6-1922).

Vicente Escudero (Foto de Man Ray, París, 1928)

Vicente Escudero (Foto de Man Ray, París, 1928)

“Un número destacado en el programa del London Pavilion es la actuación de Trini, la belleza española. Llegó a Inglaterra el pasado mes de septiembre, sin saber una palabra de inglés. No sólo se ha esforzado por aprender nuestra lengua sino también nuestros bailes, y tanto su ritmo como la precisión de sus pasos ponen de manifiesto que ha trabajado duro, mientras que su enunciación de la canción inglesa fue extraordinaria. Trini también utiliza el inglés en la conversación, y está haciendo grandes avances. Escudero, que actúa con Trini, es el más famoso intérprete del antiguo baile español en su país de origen” (The Era, 21-6-1922).

Trini está actuando en el espectáculo de variedades del London Pavilion, y muestra su dominio de la lengua inglesa cantando una canción llamada ‘Moonlight’, y también ofreciendo uno de sus bonitos bailes” (The Sketch, 5-7-1922).

Unas semanas más tarde, la sevillana es una de las protagonistas de las cenas con baile organizadas por el Trocadero:

“… Trini, la bailarina española, estaba allí para hacer una exhibición de sus facultades. Además, la organización proporcionó un par de castañuelas a cada visitante para que las tocaran, de modo que el marcado ritmo del baile español fue intensificado por muchos pares de manos” (The Era, 8-2-1922).

Trini en 'Phi-Phi' (The Sketch, 6-9-1922)

Trini Ramos en Phi-Phi (The Sketch, 6-9-1922)

Una artista en continuo crecimiento

En esos mismos días se estrena la nueva producción de Cochran, Phi-Phi, un musical ligero centrado en la figura del escultor griego Phidias, que busca un modelo ideal para representar la inocencia. El espectáculo se lleva a escena a modo de prueba en el Hippodrome de Potsmouth, antes de ser estrenado en el London Pavilion. La recepción, tanto por parte del público como de la crítica, no puede ser mejor:

“El lunes por la noche, en el Hippodrome de Portsmouth, el Sr. Charles B. Cochan presentó ‘Phi Phi’, una opereta en dos actos […]. La sala estaba llena a rebosar. La nueva producción ha recibido la más calurosa de las acogidas, y cuando cayó el telón hubo un gran entusiasmo. No cabe duda de que ‘Phi-Phi’ será un gran éxito en Londres” (The Era, 9-8-1922).

En esta obra “Trini, la encantadora bailarina española, se metamorfosea en una bailarina griega para ofrecer una bacanal con [el bailarín] Wojcikowski” (The Sketch, 6-9-1922). Su actuación no pasa desapercibida para la prensa, que publica varias fotografías suyas e incluso hay una revista, The Tatler, que le dedica una portada, con la siguiente leyenda:

“LA SEÑORA TRINI EN ‘PHI-PHI’

Lo que ha sobrepasado completamente cualquier éxito que el Sr. C. B. Cochran haya tenido en el Pavilion o en cualquier otro lugar. ‘C. B.’ puede presumir de ser el descubridor de esta hermosa bailarina española, cuando la vio en Sevilla justo antes de producir ‘The Fun of the Fayre’, su anterior éxito en el Pavilion, y la contrató de inmediato. Los resultados han demostrado lo acertado de su elección” (The Tatler, 20-9-1922).

Trini Ramos (portada de The Tatler, 20-9-1922)

Trini Ramos (portada de The Tatler, 20-9-1922)

Nueva York la reclama

En esa época los diarios norteamericanos y británicos ya empiezan a especular sobre la posible marcha de Trini a los Estados Unidos. La misma artista lo confirma en unas declaraciones al Dundee Courier en diciembre de 1922, cuando está a punto de embarcar en el transatlántico Berengaria: “No me voy a América por problemas amorosos, sino por un contrato que me ha hecho hace dos meses C. B. Cochran para el Winter Garden Theatre de Nueva York” (26-12-1922).

Trini llega a la ciudad de los rascacielos en los últimos días de 1922. Ha sido contratada por Lee y J. J. Shubert para la revista The Dancing Girl, en la que realizará “una serie sensacionales bailes españoles nunca antes presentados en América, que incluyen la ‘Farruca Torero’ o el ‘Ferocious Bull’ [toro bravo]” (The Evening Telegram, 28-12-1922).

A pesar de sus pocos años, la andaluza hace su entrada en la Gran Manzana como toda una celebridad:

“Venía acompañada de una dueña y tres doncellas, y traía un montón de baúles llenos de vestidos.

La bailarina es del tipo de pequeña andaluza, de figura esbelta, manos y pies pequeños, y grandes ojos negros, y tiene una personalidad muy atractiva. Vestía un elegante traje negro con pamela y un brillante abrigo negro bordado forrado en piel, y llevaba pendientes de cristal y un anillo de cristal a juego. Habla un poco de inglés y una pizca de francés, además de su lengua materna” (The New York Times, 1-1-1923).

Trini Ramos (The Baystander, 9-8-1922)

Trini Ramos (The Baystander, 9-8-1922)

NOTAS:

(1) La traducción de todos los textos extranjeros es nuestra.

(2) En medio de la polémica, la artista sevillana desvela sus secretos de belleza, para quien desee servirse de ellos:

“Tengo una manera muy sencilla de conseguir un buen cutis, que consiste en lavarme la cara con agua fría por la noche; aunque no hay duda de que el baile también ayuda mucho, y le diré por qué: en primer lugar, es ejercicio y, en segundo lugar, es diversión. La belleza no es algo completamente innato, sino que se crea cuando se ve el lado bueno de las cosas y se es feliz” (The Sunday Post, 30-10-1921).

(3) En junio de 1922 se lleva a escena en el London Hippodrome The Review of Revues, que incluye los mejores números de varias revistas, y entre ellos ‘Esperanto’, de The Fun of the Fayre. Los reyes y el Príncipe de Gales asisten a la representación (The Stage, 2-6-1922).

 


Trini Ramos, de la Alameda a Nueva York (II)

En 1920 la joven Trini Ramos pasea su arte por distintas ciudades del sur de España. En abril cosecha grandes aplausos en el Teatro Apolo de Ceuta y poco después se presenta en Jerez, “encantadora y como suele decirse, hecha ama del cotarro” (El Guadalete, 16-5-1920), junto a un elenco de artistas de variedades en el que destaca La Tempranica.

Tras visitar Córdoba, la guapa sevillana regresa a la ciudad del vino, donde es “acogida […] con mucho entusiasmo por el numeroso público” que acude al Teatro Eslava:

“La monísima artista hizo infinidad de números, derrochando en todos una porción grande de gracia y simpatía.

Tanto para la canción como para el baile Trini Ramos reúne muy notables condiciones, como lo tiene reconocido el público desde la anterior actuación de la bella artista.

Por eso, el que anoche fuera recibida con aplausos, que se repitieron prolongadamente a la terminación de cada número” (El Guadalete, 1-9-1920).

Trini Ramos (The Sketch, 5-7-1922)

Trini Ramos (The Sketch, 5-7-1922)

Durante su estancia en Jerez, además de cantar y bailar, Trini también asiste a los toros, que es otra de sus pasiones, y pide la llave montada a caballo.

En el mes de noviembre, “la estupenda cancionista, estrella del varietés” regresa a su Sevilla para actuar “con ruidoso aplauso” (Eco Artístico, 15-11-1920) en el Kursaal Central. Allí es prorrogada dos veces, antes de dar el salto a la capital de España.

Madrid, Albacete, Cartagena… y de nuevo Sevilla

A finales de año, Trini debuta en el Casino de Autores, sito en el Teatro Benavente de Madrid. De allí pasa a Parisiana y, posteriormente, al music hall del Hotel Palace. La joven artista seduce al respetable con su elegancia:

“La sensacional belleza de Trini Ramos, la notable bailarina, que ha debutado en el Palace Hotel, cautivó al público desde el instante en que la preciosa artista hizo su aparición en la escena.

Trini Ramos justificó el renombre que traía de provincias, viéndose obligada a hacer, entre clamorosos aplausos, cuatro repeticiones, además de su obligado programa.

La brillante concurrencia que llenaba el aristocrático ‘music-hall’ no puso límite al entusiasmo, tributando a Trini Ramos el homenaje debido a su fino arte y a su gentilísima figura” (ABC, 12-12-1920).

Durante los primeros meses de 1921, Trini visita el Salón Liceo de Albacete en varias ocasiones y causa auténtica sensación en el Teatro Principal de Cartagena:

“El trabajo que realiza esta encantadora y sugestiva artista sevillana, es notabilísimo.

La voz timbrada y armoniosa da a a sus canciones un arte fino, que deleita.

En todos sus bailes, Trini Ramos demostró ser una excelente y consumada bailarina.

Recibió constantes ovaciones y en su honor se alzó infinitas veces el telón” (La Tierra, 30-1-1921).

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

En primavera regresa a Sevilla. Su reaparición en el Kursaal Internacional es considerada todo un “acontecimiento artístico”. El público acude en masa al salón, que luce “el magnífico alumbrado que tiene reservado para las grandes solemnidades”.

“Al aparecer Trini, el público la (sic) tributó una ovación, que duró varios minutos, cantando emocionadísima el primer cuplet, que fue el de La Saeta.

A continuación ejecutó hasta nueve números, entre canciones y bailes, repitiéndose a la terminación de cada uno de ellos las ovaciones, siendo las más nutridas las dedicadas a la danza ‘Ché, mi amigo’ y a La Farruca torera” (El Liberal de Sevilla, 29-3-1920) (1).

Durante los meses siguientes, la artista se despide de sus admiradores sevillanos y jerezanos, antes de embarcarse en una aventura internacional que cambiará radicalmente el curso de su carrera.

Londres a sus pies

La gran oportunidad de su vida se la brinda el productor británico Charles B. Cochran. Durante una visita a Sevilla, el empresario queda prendado de Trini e inmediatamente le ofrece un contrato para actuar en Londres. Gratamente sorprendida, la artista no duda en aceptar:

“Yo ya había cantado muchas veces ante extranjeros y me habían aplaudido, pero he de decir que fue una sorpresa cuando el Sr. Cochran vino una noche y me ofreció un contrato tras haber hecho mi número. Después de todo, no es habitual que te pidan ir a un país extranjero tras cinco minutos de conversación. Ahora no me arrepiento de haber aceptado” (The Sunday Post, 30-10-1921) (2).

Trini Ramos (de negro) durante su actuación en la revista The Fun of the Fayre (The Sketch, 16-11-1921)

Trini Ramos (de negro) durante su actuación en la revista The Fun of the Fayre (The Sketch, 16-11-1921)

La artista sevillana debuta en el London Pavilion el 17 de octubre de 1921, en la revista The Fun of the Fayre, producida por Cochran. No obstante, días antes del estreno la prensa británica ya publica fotografías de la que se anuncia como “la mujer más bonita del mundo” (3), que a partir de entonces ya no será Trini Ramos ni Trini Muñoz, sino simplemente Trini.

Las primeras impresiones de la crítica sobre la revista no son del todo positivas. Hay quien la califica de “pobre” y tediosa, especialmente una de las escenas finales (Illustrated Sporting and Dramatic News, 29-10-1921). No obstante, estas carencias se van subsanando y el espectáculo no tarda en convertirse en uno de los grandes éxitos de la temporada.

Sin duda, “el baile es el principal atractivo” (Hull Daily Mail, 19-10-1921) de esta producción, en la que también destaca especialmente la hermosa Trini, no sólo por sus dotes de Terpsícore, sino también por su elegancia y su espléndido vestuario. Entre los números que interpreta la sevillana destacan una farruca y un baile que imita una corrida de toros:

Londres está cautivado por su exquisita belleza. Los amantes del teatro están de acuerdo en que es la chica más bonita que ha visto la escena londinense desde hace tiempo. […] En el escenario, es la esencia de la elegancia y fuera de él impresiona a todo el mundo con su gracioso porte y sus maravillosos ojos” (The Sunday Post, 30-10-1921).

“En el número ‘The Mirror of the Fayre’ “hubo mucho buen baile y no sólo una exhibición anatómica. Aquí debutó Trini” (Variety, NY, 4-11-1921).

Trini, la mujer más bonita del mundo, […] hace su primera aparición en la nueva revista en el papel de ‘Sevilla’ en ‘The Mirror of the Fayre’, con un maravilloso vestido confeccionado a partir de una mantilla de encaje negro. En la escena titulada ‘On the Road to the Bull-Ring’, cerca de Toledo, Trini se presenta como una amazona andaluza con un pintoresco traje a medida de terciopelo verde, y baila un baile nacional español, la ‘Farruca Torero’, o el ‘Ferocious Bull’ [toro bravo], que describe una corrida de toros” (The Sketch, 9-11-1921).

Trini Ramos (The Sketch, 9-11-1921)

Trini Ramos ataviada para bailar la Farruca Torera (The Sketch, 9-11-1921)

Ha nacido una estrella

La irrupción de Trini Ramos en la escena británica supone un auténtica revolución. Nada más poner un pie en Londres, su imagen ya aparece en multitud de revistas y diarios, y The Sunday Post incluso le dedica una entrevista a página completa (la publicamos aquí íntegramente hace unas semanas). En ella, la joven sevillana habla largo y tendido sobre su familia, su carrera y sus proyectos; y declara sentirse muy bien acogida en Londres:

“Aquí todo es maravilloso, […] muy diferente a España. No imaginaba que sería tan bien recibida. De hecho, tenía algunas dudas cuando llegué por primera vez. […] Lo menos que puedo decir es que los británicos son generosos. Le dan la misma oportunidad a una extranjera que a la gente de su país” (The Sunday Post, 30-10-1921).

Asimismo, Trini muestra su sorpresa ante las muchas novedades que ha descubierto en la capital británica:

“En España, por supuesto, a una chica nunca se le permite salir sola. Siempre debe estar acompañada por su madre o por un familiar. Sin embargo, cuando llegué aquí, vi las calles llenas de parejas jóvenes que van al teatro y disfrutan. […]

Todo me pareció un torbellino la primera vez que llegué a Londres. Había mucho tráfico. Luego vi por primera vez en mi vida a una mujer policía. Para una extranjera como yo, ésta parece una innovación muy extraña para una gran ciudad. Debo decir que parecían muy profesionales. Las escaleras mecánicas del metro también eran nuevas para mí. Subí y bajé seis veces para ver cómo funcionaban” (The Sunday Post, 30-10-1921).

Trini Ramos luciendo el velo doble (Illustrated London News, 24-12-1921)

Trini Ramos luciendo el velo doble (Illustrated London News, 24-12-1921)

NOTAS:

(1) Las noticias extraídas de la prensa sevillana han sido localizadas por José Luis Ortiz Nuevo y están disponibles en el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco, en Jerez de la Frontera.

(2) La traducción de todos los textos extranjeros es mía.

(3) Llaman particularmente la atención unas fotografías en las que Trini luce una versión del típico velo musulmán, confeccionado en encaje negro por el famoso diseñador francés Paul Poiret (The Sunday Post, 30-10-1921).

 


Trini Ramos, de la Alameda a Nueva York (I)

Durante las primeras décadas del siglo XX, artistas como Pastora Imperio o Amalia Molina pasearon el nombre de España y el de Sevilla por los escenarios del mundo, y hoy ocupan un lugar destacado entre nuestras estrellas más internacionales. Sin embargo, no son las únicas que en aquella época alcanzaron la gloria allende los mares. Si hace unas semanas nos acordábamos de la malograda María Montero, ahora queremos rendir tributo, porque nos parece justo y necesario, a otra hija de Serva la Bari, la gran Trini Ramos.

Trini Ramos (The Sketch, 5-7-1922)

Trini Ramos (The Sketch, 5-7-1922)

Artista precoz

Trinidad Muñoz Blanco -nombre real de la artista- nació en Sevilla en 1904 (1) y desde pequeña se sintió atraída por el arte. Fue discípula del maestro Manuel Real, ‘Realito’, que tenía su academia en el número 51 de la calle Trajano (junto a la Alameda de Hércules, donde Trini pasó sus primeros años de vida); y, según su propio testimonio, actuó por primera vez en público a muy corta edad:

“… debuté en Sevilla a los once años. Cuando subí al escenario, mi madre, que estaba entre bastidores, me susurró: ‘Hazlo lo mejor que puedas, Trini’, y lo hice. Cantar ante un público aristocrático debía haberme puesto nerviosa, pero supongo que era demasiado joven para tener nervios” (The Sunday Post, 30-10-1921) (2).

La prensa hispalense de 1915-16 hace referencia a esas primeras actuaciones de la joven Trini Muñoz, que también se anunciaba en aquellos años como ‘Petit Fornarina’, en honor a la malograda artista Consuelo Vello (3). La Sociedad Benavente, el Salón Vigil o el Salón de Variedades son algunos de los locales sevillanos en los que se puede admirar a la precoz cancionista:

“[Sociedad Benavente] … se presentó la simpática cancionista y bailarina Trini Muñoz, siendo premiada su labor con una ovación…” (El Liberal de Sevilla, 17-10-1915) (4).

“[Sociedad Benavente] … actuó la pequeña cancionista Trini Muñoz, que también fue grandemente aplaudida” (El Liberal de Sevilla, 1-11-1915).

“[Salón Vigil, C/ Trajano, 14] Allí hemos visto a la hermosa artista de ‘varietés’ Amalia Manzano, un nutrido cuadro flamenco, al sexteto de baile La sal de Andalucía, la futura ‘estrella’ y bella muchacha la ‘cancionista’ ‘petite’ Fornarina, la pareja de baile Las Goyitas y al célebre cantador de estilo flamenco Niño Medina” (El Liberal de Sevilla, 5-2-1916).

Consuelo Vello Cano, la Fornarina

Consuelo Vello Cano, la Fornarina

A pesar de su juventud, Trini empieza ya a mostrarse como la gran artista que está llamada a ser, tanto por la impecable presentación de sus números como por el arte y la gracia con que los ejecuta. En esa etapa inicial de su carrera, la joven se dedica sobre todo a cantar, hasta que una laringitis la obliga a desarrollar su faceta de bailaora, que será la que más cultive durante toda su vida artística (5):

“Se ha despedido con gran éxito del ‘Salón de Variedades’, la notable y monísima canzonetista, Trini Muñoz, Petit-Fornarina. Tan aplaudida artista trae un lujoso vestuario y alhajas de gran valor. Canta de una manera inimitable su canción predilecta, titulada Mari, siendo ovacionada con gran entusiasmo, y teniendo que repetirla. Trini es una consumada artista, que con verdadero arte y sumo gusto, parece una muñequita, y constituye un número de varietés de los pocos que existen en esta clase de género. La sal y la gracia sevillana son patrimonio de esta preciosa chiquilla.

Esta es muy joven, una niña, y es digna de figurar en primera fila…” (La Región Extremeña, 13-7-1916).

Imparable

Durante esos años, la Petit Fornarina también se anuncia en el Café Suizo de Madrid, y en varias localidades navarras. En agosto de 1917 se la puede ver de nuevo en Sevilla, donde provoca una auténtica revolución:

“… Tan preciosa artista, que ha actuado quince días con grandes éxitos en el bonito ‘Salón Circo Victoria’ deja gratos recuerdos, pues dicha artista, que cuenta trece años de edad, es un fenómeno en el género de varietés. Su despedida fue un acontecimiento, llenándose de ‘bote en bote’ dicho Salón. Después de su predilecta canción ‘Mari’, tuvo que repetir otras, siendo ovacionada con gran entusiasmo, y llenándose el escenario de sombreros y varias palomas con cintas de los colores nacionales. Es mucha artista esta chiquilla” (La Región Extremeña, 2-8-1916).

Trini Ramos (The Sketch, 12-10-1921)

Trini Ramos (The Sketch, 12-10-1921)

En abril de 1918, la cupletista hace su presentación en el Gran Café Universal de Vitoria. En diciembre vuelve a actuar en Sevilla, en el Salón Llorens, y en febrero de 1919, en el Novedades. Durante esos años, en plena Guerra de Rif, Trini también se embarca en una gira por Marruecos que bien podría haberle costado la vida, según declara más tarde la propia artista a una publicación británica:

“Mi contrato había terminado una noche en un teatro marroquí, cuando el mánager me suplicó que me quedara dos semanas más. Como había tan pocas chicas cantantes, yo había triunfado. Al principio, no quería quedarme. De hecho, sentía un poco de nostalgia y quería regresar a Sevilla; pero después de hablarlo mucho, mi madre estuvo de acuerdo en que debería quedarme dos semanas más. Creo que debe haber sido el destino.

El resto de la compañía con la que tenía que haber viajado se marchó. Al día siguiente oímos que los moros salvajes los atacaron en cuanto salieron de la ciudad. Después se produjo una salvaje persecución a caballo y, durante el curso de la misma, una persona fue asesinada, dos fueron capturadas, probablemente con el fin de pedir un rescate, y otra resultó gravemente herida” (The Sunday Post, 30-10-1921).

Trini es profeta en su tierra sevillana

A partir de 1920, el nombre de Trini Ramos -que ya se anuncia con este apelativo- aparece con mucha más profusión en la prensa sevillana. En el mes de enero es la estrella indiscutible de dos fiestas ofrecidas por el maestro Manolo Real, para celebrar su onomástica y para agasajar a unas damas inglesas. Entre los asistentes destacan importantes personalidades de la literatura y la aristocracia, además de artistas como La Yanki, La Sevillanita o los Gómez Ortega. El toque corre a cargo del maestro de piano José Pérez y del guitarrista Currito el de la Jeroma:

“… el notable maestro José Pancho, no cesó un momento de tocar al piano todo género de bailes, desde las clásicas bulerías al más delicado vals

Manolo Real se desvivía en obsequiar a sus amigos […]. Porque, eso sí, el vino y el tabaco y los dulces serán cosas casi divinas, pero Trini Ramos, La Fornarina antes, era la concreción de todas esas casi divinidades. Anoche Trini estaba monumental. Bailó el ‘Ché, mi amigo’…” (El Liberal de Sevilla, 2-1-1920).

Trini Ramos (The New York Public Library)

Trini Ramos (The New York Public Library)

Durante los meses siguientes, la joven bailarina y cupletista sigue cosechando éxitos en su tierra, primero en el Salón Imperial y después en el Kursaal Central. La crítica destaca su estilo elegante y refinado, que huye de la chabacanería, y ve en ella a una gran estrella en potencia. Entre las artistas con las que comparte cartel destacan Dora la Cordobesita, Salud Miranda o Carmelita la Imperial:

Trini la Fornarina continúa con pleno éxito su actuación en el Salón Imperial. El público, que admira su belleza y sus muchas simpatías tanto como su arte de cupletista y bailarina, bien notable entre las de su clase, la aplaude con calor en todos sus números, que constituyen una verdadera selección.

A esta artista la anima una fuerte voluntad, que la hará triunfar fácilmente en plazo muy breve, porque tiene lo que pudiéramos decir, siguiendo la corriente de estos tiempos, ‘primera materia’” (El Liberal de Sevilla, 17-2-1920).

“Nuestra bella paisana […] es una de las artistas que pronto pasarán a la calidad de estrellas y en el Kursaal ha de ‘cerrar telón’ muy pronto, porque su arte, sus enormes simpatías y su gracia se imponen. […]

El Kursaal ha encontrado en Trini Ramos la artista de la temporada. Trini ha demostrado con sus números, finos y delicados, que las ‘varietés’ agraden a todos los concurrentes de estos salones, y que no eche de menos el público a las que, apelando a las mallas, creen agradar más” (El Liberal de Sevilla, 5-3-1920).

“… El público le hizo repetir, en medio de ruidosas ovaciones, cuantos números ejecutara.

En los diez días que Trini Ramos ha actuado en el Kursaal logró adueñarse, por su simpatía y por su arte, de la voluntad del público…

Trini Ramos recibió anoche, además de numerosos regalos de sus admiradores, inequívocas pruebas del cariño que ha logrado conquistarse” (El Liberal de Sevilla, 11-3-1920).

NOTAS:

(1) Según escribe Santiago Martín Moreno en su blog Desde mi barrio, la artista vino al mundo en la calle Lumbreras, el 13 de junio de 1904; y sus padres, oriundos de Alcalá de Guadaira, se llaman Manuel Muñoz y Carmen Blanch.

(2) La traducción de todos los textos extranjeros es mía.

(3) La cupletista madrileña Consuelo Vello Cano (1885-1915), conocida artísticamente como ‘La Fornarina’, durante su breve pero intensa carrera, cosechó grandes éxitos en los escenarios españoles y europeos.

(4) Las noticias extraídas de la prensa sevillana han sido localizadas por José Luis Ortiz Nuevo y están disponibles en el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco (Jerez de la Frontera).

 (5) “Trini empezó siendo cantante, pero tuvo un severo ataque de laringitis y pensó que bailaría hasta que se curara. Sigue bailando desde entonces” (Buffalo Courier-Express, 20-3-1932).

 


Trini Ramos, “LA CHICA MÁS BONITA DEL MUNDO”

“La bailarina de diecisiete años de edad y su extraño romance

Entrevista exclusiva del ‘Sunday Post’.

¿Quién es la chica más bonita del mundo? (1)

Hace sólo un mes, quienes están familiarizados con lo que sucede detrás de los escenarios en el mundo del teatro decían que C. B. Cochran (2) la había descubierto en España, y que iba a tomar parte en su próxima gran producción.

Trini Ramos luciendo el velo doble (Illustrated London News, 24-12-1921)

Trini Ramos (Illustrated London News, 24-12-1921)

Trini causó bastante sensación en Londres antes de hacer su debut frente al público británico, al aparecer con su ya famoso velo doble de musulmana. El velo, que está confeccionado con un grueso encaje negro especial, fue diseñado por Paul Poiret, el famoso diseñador francés (3), y con toda la cara cubierta salvo los ojos. Era algo similar al velo que que llevan las mujeres turcas. La única diferencia consistía en que, mientras que Trini se quitaba el velo al mismo tiempo que el sombrero, las mujeres orientales lo llevan unido al resto del traje.

Trini llamaba la atención con su singular vestido, y cuando se encontraba en las inmediaciones de Regent Street y del teatro, era el centro de atención.

El velo acaba de ser desechado y Trini, la joven bailarina española -que, por cierto, sólo tiene diecisiete años-, ha hecho su primera aparición ante un público británico en ‘The Fun of the Fayre’, el nuevo espectáculo del London Pavilion. Más tarde, si los planes salen según lo previsto, visitará Glasgow.

Las historias que se cuentan sobre su belleza no son exageradas. Londres está cautivado por su exquisita belleza. Los amantes del teatro están de acuerdo en que se trata de la chica más bonita que ha visto la escena londinense desde hace tiempo. Trini es como una Virgen niña, con pelo negro azabache, delicada frente, ojos oscuros y luminosos, pequeños labios carnosos, carita oval y siempre una sonrisa. En el escenario, es la esencia de la elegancia y fuera de él impresiona a todo el mundo con su gracioso porte y sus maravillosos ojos.

Una maravillosa carrera

A pesar de su juventud, Trini ha desarrollado una peligrosa pero maravillosa carrera. Se presentó por primera vez en público a la edad de once años. Para poder hacerlo tuvo que conseguir un permiso especial del Gobernador de Sevilla, que se quedó tan impresionado por la voz y los gestos perfectos de la niña, que decidió saltarse la ley y dejarla tener su oportunidad.

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

Su profesor de música tenía tanta confianza en que ella lo haría bien, que su primer espectáculo público fue ante una reunión de aristócratas españoles (4). La actuación fue un gran éxito. Las notas de su garganta infantil salieron tan dulces y claras, que la exclusiva concurrencia apaudió y jaleó una y otra vez. Gracias a esa primera actuación, inmediatamente contactaron con ella los representantes teatrales españoles. En una sola noche se había convertido en estrella.

A partir de ese momento, Trini nunca miró hacia atrás. Se presentó en toda España y Marruecos antes de venir a este país, y aquí ha vuelto a conseguir un éxito inmediato. En uno de sus papeles en ‘The Fun of the Fayre’, encarna a uno de los cuatro grandes tipos de belleza que existen en el mundo.

Fascinantes aventuras

En el curso de su carrera teatral Trini ha vivido fascinantes aventuras. Una vez toda la compañía fue capturada por los moros -una persona fue asesinada- mientras que Trini, por una afortunada casualidad, fue la única que escapó.

Fue mientras bailaba en un cabaret español cuando fue descubierta por el Sr. C. B. Cochran, que la trajo a este país. Durante una visita a España, al Sr. Cochran le sugirieron asistir al cabaret donde bailaba Trini para ver a ‘la chica más bonita del mundo’. Así lo hizo y, sin esperar a verla bailar por segunda vez, se acercó a ella con la idea de traerla a Inglaterra y consiguió que firmara un contrato para actuar en Gran Bretaña.

Su propia historia

Ésta es su propia historia. Me la contó tras su exitosa primera noche en Londres:

‘Aquí todo es maravilloso’, dijo, ‘muy diferente a España. No imaginaba que sería tan bien recibida. De hecho, tenía algunas dudas cuando llegué por primera vez. Después de todo, nunca se sabe qué impresión se puede causar en otro lugar. Lo menos que puedo decir es que los británicos son generosos. Le dan la misma oportunidad a una extranjera que a la gente de su país’.

Trini Ramos (The Sketch, 9-11-1921)

Trini Ramos (The Sketch, 9-11-1921)

‘Actuar aquí es muy diferente de hacerlo en España y no podía evitar pensar en el contraste entre Piccadilly y algunas calles españolas. En mi tierra, por ejemplo, una chica nunca puede salir sola. Siempre debe ir acompañada por alguien de su familia. Nunca he ido al teatro sin dos o tres personas que me protegieran. Por otra parte, los moros están tumbados uno al lado del otro en las aceras y, cuando salíamos tarde del teatro, teníamos que pasar con cuidado entre ellos. Y si nos hubiésemos atrevido a molestarles, habríamos tenido algún problema. Sin embargo, aquí es muy diferente. Donde los moros duermen en nuestro país, ustedes tienen cientos de coches de motor corriendo’.

Su debut cuando era una niña

‘Mi acogida aquí ha sido tan maravillosa que me siento como el día que debuté en Sevilla a los once años. Cuando subí al escenario, mi madre, que estaba entre bastidores, me susurró: ‘Hazlo lo mejor que puedas, Trini’, y lo hice. Cantar ante un público aristocrático debía haberme puesto nerviosa, pero supongo que era demasiado joven para tener nervios. La buena acogida que obtuve tras la canción sirvió para animarme y nunca me puse nerviosa después de eso’.

‘Esa primera noche conseguí mi primer contrato, y entonces viajé por toda España y Marruecos, cantando y después bailando. Puede que no lo hubiera firmado, de haber sabido lo que iba a ocurrir. Créame, no es ninguna broma ser actriz en Marruecos, especialmente para una chica de 14 ó 15 años’.

Capturada por los moros

‘A veces estaba muy asustada. Era bastante común ser capturada por esos moros salvajes (5). Mi contrato había terminado una noche en un teatro marroquí, cuando el mánager me suplicó que me quedara dos semanas más. Como había tan pocas chicas cantantes, yo había triunfado. Al principio, no quería aceptar. De hecho, sentía un poco de nostalgia y quería regresar a Sevilla; pero después de hablarlo mucho, mi madre estuvo de acuerdo en que debería quedarme dos semanas más. Creo que debe haber sido el destino’.

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

Trini Ramos (The Sunday Post, 30-10-1921)

‘El resto de la compañía con la que tenía que haber viajado se marchó. Al día siguiente oímos que los moros salvajes los atacaron en cuanto salieron de la ciudad. Después se produjo una salvaje persecución a caballo y, durante el curso de la misma, una persona fue asesinada, dos fueron capturadas, probablemente con el fin de pedir un rescate, y otra resultó gravemente herida’.

‘Supongo que todo este tipo de cosas pueden sonar muy salvajes para los británicos que viven en un país civilizado, pero los asesinatos por parte de los moros son incidentes que ocurren todos los días en Marruecos. Yo sólo estoy muy agradecida por encontrarme aquí ahora, mientras se libra la guerra entre los españoles y los moros. En otra ocasión, me capturaron a caballo con el resto de la compañía, pero las tropas de una ciudad cercana vinieron y nos salvaron’.

Arreglada en cinco minutos

‘Ésta fue la clase de experiencias que viví durante el tiempo que pasé de gira en Marruecos. Naturalmente, se producen cantidad de sorpresas cuando se viaja por lugares extraños. Yo ya había cantado muchas veces ante extranjeros y me habían aplaudido, pero he de decir que fue una sorpresa cuando el Sr. Cochran vino una noche y me ofreció un contrato tras haber hecho mi número. Después de todo, no es habitual que te pidan ir a un país extranjero tras cinco minutos de conversación. Ahora no me arrepiento de haber aceptado’.

‘Desde que he llegado aquí, todo el mundo me ha preguntado por las corridas de toros. Si se menciona a España, los toros parecen ser el siguiente tema de conversación que surge de manera natural. Realmente, me encantan las corridas de toros. No son algo cruel en absoluto, como dice la gente; de hecho, se hace todo lo posible para evitar la crueldad. Una corrida de toros en España es similar a vuestras carreras de Ascot. Realmente, es un desfile de moda. Ver todos los vestidos y a las mujeres en el teatro, que puede contener a una tres mil personas, es maravilloso. Todas las chicas se ponen sus mejores galas para la ocasión. Las faldas se colocan de modo que una parte de ellas cuelgue de los balcones y, como le digo, es muy bonito. Muchas personas llegan en algún tipo de carruaje y, por lo que he oído de vuestro Derby, una corrida de toros es una especie de Derby con los vestidos de Ascot’.

En la plaza de toros

‘Mi única participación en una corrida ha consistido en recorrer la arena a caballo y pedir al presidente la llave de la puerta tras la que se encuentra encerrado el toro. El presidente podría ser el Rey o algún personaje importante presente en la reunión. Ésa es la costumbre. Tras haber obtenido la llave, se la entrego al guardián, que deja salir al toro, y entonces la diversión está asegurada’.

Trini Ramos pide la llave durante una corria de toros en Jerez (La Lidia, 20-9-1920)

Trini Ramos pide la llave durante una corria de toros en Jerez (La Lidia, 20-9-1920)

‘El único momento en que se produce daño de verdad es cuando el torero es derrotado en la lucha. Por supuesto, si el toro sale victorioso algunos espectadores suelen pasarlo bien. Cuando eso ocurre, se produce un repentino ajetreo y un desgarro de vestiduras. En general, los toreros suelen ser tan hábiles que el toro muere en un instante’.

La belleza no sale de los frascos

‘Sólo llevo una semana en el London Pavilion, pero ya estoy recibiendo cartas que me piden consejos de belleza. Supongo que el hecho de que desempeñe el papel de una belleza en el espectáculo es lo que las ha atraído. Personalmente, no creo que la belleza proceda de los frascos. Tengo una manera muy sencilla de conseguir un buen cutis, que consiste en lavarme la cara con agua fría por la noche; aunque no hay duda de que el baile también ayuda mucho, y le diré por qué: en primer lugar, es ejercicio y, en segundo lugar, es diversión. La belleza no es algo completamente innato, sino que se crea cuando se ve el lado bueno de las cosas y se es feliz. Creo que muchos médicos todavía dicen que los músculos de la cara cambian de vez en cuando -gradualmente, por supuesto-; y, por tanto, evitar las preocupaciones innecesarias nos ayuda a tener ese brillo en los ojos y esa simpatía en la cara. Además, el baile nos mantiene delgados y gráciles. Mi mayor temor es engordar, pero bailar mucho evitará que eso suceda’.

Primeras impresiones

‘Realmente pienso que las chicas británicas son tan guapas como todas las otras chicas que he visto. Parecen tener ese algo que las marca como británicas, un tipo exclusivo de belleza que las extranjeras no tenemos. Ésa fue una de las primeras impresiones que tuve cuando llegué aquí hace unas semanas. Hubo muchas más, algunas de las cuales me hicieron sentirme celosa por no haber nacido aquí’.

Me sorprendió mucho ver la calle llena de parejas de novios. Yo nunca he tenido una relación amorosa. En España, por supuesto, a una chica nunca se le permite salir sola. Siempre debe estar acompañada por su madre o por un familiar. Sin embargo, cuando llegué aquí, vi las calles llenas de parejas jóvenes que van al teatro y disfrutan’.

Un torbellino

‘Todo me pareció un torbellino la primera vez que llegué a Londres. Había mucho tráfico. Luego vi por primera vez en mi vida a una mujer policía. Para una extranjera como yo, ésta parece una innovación muy extraña para una gran ciudad. Debo decir que parecían muy profesionales. Las escaleras mecánicas del metro también eran nuevas para mí. Subí y bajé seis veces para ver cómo funcionaban’.

Trini Ramos (de negro) durante su actuación en la revista The Fun of the Fayre (The Sketch, 16-11-1921)

Trini Ramos (de negro) durante su actuación en la revista The Fun of the Fayre (The Sketch, 16-11-1921)

‘Con todas las cosas nuevas que he visto, las parejas de novios y otras novedades, me gusta mucho Londres. Los británicos, a pesar de no ser tan emocionales como los extranjeros, son muy generosos. Cuando estaba en España, canté y bailé ante buena parte de la aristocracia, pero nunca tuve la oportunidad de hacerlo ante la realeza. Espero, no obstante, y tengo motivos para pensar que tendré la oportunidad de hacerlo cuando el rey de España llegue a Londres, que lo hará pronto. También creo que tendré ocasión de ir a Glasgow. Estoy contratada para tres años (6) y es casi seguro que iré a la mayor ciudad de Escocia’”.

NOTAS:

* Fuente: The Sunday Post, Londres, 30 de octubre de 1921. La traducción es mía.

(1) Así se anunció en Londres a la bailaora y cupletista sevillana Trini Ramos, nacida a principios del siglo XX.  Se inició en el mundo del arte a muy corta edad como ‘Petite Fornarina’ o Trini Muñoz, que es su verdadero nombre. En 1921 fue contratada para actuar durante varios meses en la capital británica y posteriormente marchó a Nueva York, donde cosechó grandes éxitos hasta el momento de su retirada, a mediados de los años 30.

(2) El productor y empresario teatral británico Charles B. Cochran descubrió a Trini Ramos en España y la llevó a Londres para trabajar en la revista The Fun of the Fayre, que supuso su lanzamiento a nivel internacional. La sevillana causó auténtica sensación en la capital británica, donde no tardó en convertirse en un icono de moda. De hecho, sólo unas semanas después de su llegada, el ‘Sunday Post’ le dedicaba esta entrevista a página completa y poco despuésposaba como modelo para otros medios.

(3) Paul Poiret fue un prestigioso modisto francés, que realizó importantes aportaciones a la moda del siglo XX y contribuyó en buena medida a la eliminación del corsé del atuendo femenino.

(4) Trini fue discípula de Manuel Real, ‘Realito’, que tenía su academia en la sevillana Calle Trajano. Probablemente debutara en alguna de las fiestas privadas para las que el maestro solía ser contratado con su cuadro.

(5) En esa época se libra en Marruecos la Guerra del Rif, provocada por la sublevación de las tribus indígenas contra la ocupación colonial española.

(6) Ese contrato no llegó a término, pues unos meses más tarde Trini Ramos ya triunfaba en Nueva York.

 


María Montero, una brillante carrera truncada por la tragedia (III)

Sólo dos años ha necesitado María Montero para convertirse en la artista mimada tanto del público como de la aristocracia española residente en Nueva York, según se desprende del artículo enviado a ABC por Miguel de Zárraga, su corresponsal en la Gran Manzana:

Nueva York ha prohijado a una gran bailarina española, la sevillana María Montero, haciéndola aquí imprescindible. Baila cuanto quiere, donde quiera y por lo que quiere, y hasta los directores cinematográficos, cuando se disponen a perpetrar alguna de sus típicas españoladas, la consultan…” (ABC, 20-7-1924).

María Montero (Cine-Mundial, febrero de 1927)

María Montero (Cine-Mundial, febrero de 1927)

Es precisamente esa gran admiración hacia María lo que lleva a un grupo de aristócratas y gente bien de la colonia española a convertirse en actores por un día para homenajear a la sevillana en el Longrace Theatre de Nueva York:

“… la encantadora bailarina, que pudo americanizar sus danzas, para un más fácil triunfo, pero no su corazón, acaba de aceptar una importante función a beneficio suyo, organizada y puesta en escena por un simpático número de admiradores […] [Diversos aristócratas] y otros cuantos compatriotas de apellidos no menos prestigiosos, fueron los promotores de la fiesta, en la que, como espectáculo culminante, se ha representado la preciosa comedia quinteriana Puebla de las Mujeres.

[…] El éxito de los improvisados actores fue rotundo. Y el público, que pagara a dos dólares y setenta y cinco centavos la butaca, no se arrepintió de haber llenado el Longacre Theatre.

Un gran tenor del Metropolitán, el costarricense Manuel Salazar, mereció, sin embargo, los más entusiastas aplausos de la noche” (ABC, 20-7-1924).

La sirena de Sevilla

En octubre de 1924 se lleva a escena en el Strand Theatre de Nueva York la comedia musical The Arbor of Love, en cinco escenas, que incluyen bailes franceses, americanos, rusos y españoles, estos últimos protagonizados por María Montero (The Sun, 7-10-1924). En esa época también se puede ver a la sevillana en la inauguración del Art Studio Club en la terraza del Hotel Beaux Arts (Variety, 15-10-1924) (1).

Unas semanas más tarde se proyecta en el Piccadilly Theatre el filme The Siren of Seville, un drama taurino de H. H. Van Loan, dirigido por J. Strom y H. Stromberg. Sus protagonistas son Priscilla Dean, como Dolores, y Allen Forrest, como Gallito. El programa incluye las actuaciones del cantante Vicente Cortez, que interpreta la “Canción del Torero” de Carmen; la bailarina María Montero, que “gusta en su danza española”, y la soprano Annete Koyak, que canta “La partida” y “Clavelitos” (The Brooklyn Daily Eagle, 17-11-1924).

Cartel de la película La sirena de Sevilla (1926)

Cartel de la película La sirena de Sevilla (1926)

Las noticias de este evento no tardan en llegar a nuestro país:

“El hispanófilo Lee A. Ochs […], que acaba de inaugurar su lujoso Piccadilly Theatre, conmemoró la apertura del nuevo coliseo estrenando La sirena de Sevilla en una memorable noche española…

La fiesta, presidida por el cónsul general de España, D. Alejandro Berea, al que acompañaban casi todos los cónsules hispano-americanos aquí residentes, comenzó con la Marcha Real española […]. Siguió un selecto concierto de obras hispanas, y, como prólogo de La sirena de Sevilla, apareció en persona la sin rival María Montero, sirena de carne y alma, en cuyo espíritu arde todo el fuego andaluz, asomado a sus ojos para en ellos duplicar el sol de aquella tierra bendita. […]

… la Montero volvió, una vez más, a deslumbrarnos desde el incomparable cielo neoyorquino, en plena vía blanca, como estrella fulgurante de este maravilloso Broadway, […] toda ella es luz. Es luz, y es alegría, y es fuego… Y sus danzas, ¡tan españolas!, la han hecho inmortal. La música que baila es de Granados, de Falla, de Albéniz… ¡De España siempre!” (ABC, 3-1-1925).

Esta crónica también la firma Miguel de Zárraga, quien aprovecha la ocasión para ofrecer algunos detalles sobre la brillante trayectoria de la bailaora, que se ha convertido en toda una institución desde el punto de vista tanto artístico como social:

María Montero, sevillana, es la más castiza representación de Andalucía en los Estados Unidos de esta inmensa América del Norte. Ella plantó aquí sus reales, después de una larga campaña de triunfos por todos los demás países del continente americano; y en Nueva York fue proclamada emperatriz de las danzas españolas. Bailó en los principales teatros y la recibieron, con tantos honores como agasajos, en las mejores casas. Porque María Montero, gran artista, es también gran señora… Una gran señora que, a su vez, recibe en su saloncillo de la calle 57 a lo más linajudo de nuestra colonia, figurando entre sus contertulios, indistintamente, aristócratas, literatos, hombres de negocios, pintores, cómicos, periodistas, gentes de circo, empresarios… Cuantos conocen a María la rinden asiduo homenaje, como artista y como dama. Los ricos la obsequian, y ella obsequia a los pobres. Su casa, es frecuentemente, asilo de menesterosos” (ABC, 3-1-1925).

María Montero (Long Island Daily Press, 30-6-1928)

María Montero (Long Island Daily Press, 30-6-1928)

Primeros éxitos con Bolm y Falla

El año 1925 llega cargado de nuevos proyectos para la Montero. El primero de ellos es el estreno de una nueva versión de El amor brujo de Falla en la Allied Arts Society de Chicago, con la compañía de Adolf Bolm (2):

Adolf Bolm merece una mención especial por el bello arte con que llevó a escena los ballets, y con el que él y sus colegas los bailaron […]. El amor brujo, de Manuel de Falla, un ballet pantomima en un acto, fue la primera de las piezas de baile que se interpretaron. […] Aunque la historia es ligera y no especialmente llamativa, la música resultó ser de extraordinario interés. De Falla es un ferviente nacionalista y su ballet, como otros trabajos de su creación, está fuertemente teñido de color español.

El Sr. Bolm acentuó este sabor racial, no sólo con su propio baile y el de sus colaboradores, sino con la importación de la Sra. María Montero, que ha adquirido cierta distinción como intérprete de bailes españoles en su país de origen. Además de su baile en El amor brujo, […] a la Srta. Montero se la pudo ver en dos números en solitario, en los que la atmósfera española estaba inteligentemente conseguida” (The Christian Science Monitor, 9-1-1925).

Poco después se inaugura la nueva temporada de invierno en la Sala El Patio, que vuelve a contar con la artista española para sus bailes especiales, y en el mes de marzo se puede admirar el arte de María Montero en un “Baile gitano” organizado por el magnate de la prensa William Randolf Hearst en honor del embajador norteamericano en España, Alexander P. Moore. Éste tiene lugar en el Hotel Ritz-Carlton de Nueva York, donde se establece un campamento gitano de imitación, con 400 árboles traídos de los bosques de Maine.

Gracias al corresponsal de ABC en la Gran Manzana, siguen llegando a nuestro país noticias sobre las últimas actuaciones de la sevillana. En junio de 1925 se anuncia su próxima participación en La vida breve, de Manuel de Falla, que tiene previsto representarse en el Metropolitan de Nueva York.

Una artista polifacética

Otro tipo de espectáculos para los que la Montero sigue estando bastante solicitada son los programas musicales que acompañan a los estrenos cinematográficos. En esa época se la puede ver en el Globe Theatre de Nueva York, donde se proyecta Don Q Son of Zorro (D. Crisp, 1925), un filme ambientado en España pero bastante “lamentable desde el punto de vista español”, según la crítica:

“De España no hemos visto más en esta noche que los bailes españolísimos de María Montero, indestronable emperatriz de nuestras danzas castizas en el neoyorquino Broadway” (ABC, 17-7-1925).

Ramón Mateu con María Montero y la obra inspirada en la artista (Diario de la Marina, 17-1-1926)

Ramón Mateu con María Montero y la obra inspirada en la artista (Diario de la Marina, 17-1-1926)

En el mes de agosto se proyecta en el Uptown Theatre de Chicago The Lady Who Lied (E. Carewe, 1925). El programa incluye el número ‘Under Spanish Skies’, en el que María interpreta sus bailes españoles. En octubre, en el Teatro Rivoli de Nueva York se ofrece la película Flowers of night (Paul Bern, 1925), acompañada del número musical “Danse Espagnol” a cargo de la bailaora sevillana.

Además de bailar y enseñar los bailes españoles, María Montero también hace incursiones en otras facetas artísticas. Así, por ejemplo, posa como modelo para el escultor valenciano Ramón Mateu, que se inspira en ella para una de sus obras. En febrero de 1926, la sevillana es una de las asistentes al almuerzo con que se agasaja al artista en la redacción del Diario de la Marina en Nueva York, sita en el Hotel Alamac (Diario de la Marina, 9-2-1926).

Unas semanas más tarde, el periodista Miguel de Zárraga vuelve a acordarse de María Montero en un artículo titulado “Danzarinas y tonadilleras”, que destaca a tres artistas españolas -y sevillanas- que en esos momentos triunfan en Nueva York. Se trata de Amalia Molina, “la suprema artista del casticismo, ¡la única!, incapaz de transigir con la innovaciones o imposiciones de la moda extranjera”; Trini Ramos, que “no se quiso contentar con el solo culto a la Sevilla que la (sic) dio su belleza soberana, y, en alas de una legítima ambición, voló de mundo a mundo, asimilándose cuantos encantos se encontró al pasar”, y María.

“… Cada una en lo suyo, las tres se destacan, y las tres, en imparcial espíritu de espontánea admiración, bien pudiéramos considerarlas como representativas del arte popular que de tan distintos modos encarnaron. […]

María Montero, más dúctil, supo amoldarse a todos los gustos imperantes, aunque haciéndolos siempre compatibles con el tan caracterizado españolismo de sus danzas, que como ráfaga de alegría y de luz la pasearon en triunfo por los mejores escenarios del Broadway” (Cine-Mundial, marzo de 1926).

NOTAS:

(1) La traducción de todos los textos extranjeros es nuestra.

(2) Adolph Bolm se formó como bailarín en San Petersburgo y fue una de las primeras figuras de los Ballets Rusos de Diaghilev.