Flamencas por derecho

Mujeres que han dejado su impronta en la historia del flamenco

Flamencas por derecho - Mujeres que han dejado su impronta en la historia del flamenco

Encarnación ‘La Malagueñita’, salero y elegancia a partes iguales (II)

Tras conquistar al público cubano, en noviembre de 1918 Encarnación Hurtado embarca en el vapor Montserrat, que sale de La Habana con rumbo a tierras aztecas. En México se espera con impaciencia a “tan célebre bailarina, que es considerada hoy como la mejor en su género” (El Diario, 18-11-1908), y que “se ha hecho famosa por su elegancia y su irreprochable arte en el baile andaluz y principalmente ejecutando los sugestivos bailes el Garrotín y la Farruca” (El Correo Español, 24-11-1908).

La Malagueñita (Eco Artístico, 6-5-1911)

La Malagueñita (Eco Artístico, 6-5-1911)

Su debut tiene lugar el 24 de noviembre en el Salón Monte-Carlo. Allí comparte cartel, entre otros artistas, con la pareja de bailes españoles formada por Carmen Díaz y Enrique Sánchez.

En enero de 1909, la “reina del baile andaluz” (El Diario, 6-12-1908) es contratada por la empresa del Teatro María Guerrero para inaugurar la temporada de invierno. Como viene siendo habitual en todos los lugares donde actúa, Encarnación “atrae gran concurrencia con sus magníficos bailes ‘El Garrotín’ y ‘La Farruca’, constituyendo un gran atractivo para el público” (El Diario, 10-1-1909). Además, La Malagueñita también destaca como cupletista.

En el mes de febrero, la bailaora regresa al Salón Monte-Carlo. Allí permanece varias semanas, transcurridas las cuales es agasajada con un beneficio en el que tanto el público como sus compañeros le demuestran su afecto y admiración:

“Muchas flores y muchos aplausos conquistóse anoche, en su función de beneficio, la graciosa bailarina española ‘La Malagueñita’, que tan brillante campaña está llevando a cabo en el Salón Monte-Carlo.

Tomaron parte en la función casi todos los artistas de variedades que trabajan en los salones de Méjico (sic), y todas las tandas estuvieron concurridísimas.

La beneficiada echó el resto en los bailes del ‘Garrotín’ y la ‘Farruca’, de los que es creadora, y constantemente fue ovacionada por sus numerosos y entusiastas admiradores” (El Correo Español, 25-3-1909).

Carmen Díaz y Enrique Sánchez (Eco artístico, 15-3-1917)

Carmen Díaz y Enrique Sánchez (Eco Artístico, 15-3-1917)

De nuevo Madrid – La Habana – México

En julio de 1909, La Malagueñita se anuncia en varios teatros españoles, como el Coliseo Imperial de Valencia o el Gayarre de Barcelona. Un mes más tarde, tras su “brillante tournée por provincias” (El Mundo, 23-7-1909), Encarnación Hurtado regresa a La Habana y se presenta en el Molino Rojo la “reina indiscutible del baile flamenco y del Molinete” (El Mundo, 10-8-1909), que “reivindic[a] su título de doctora en flamenquerías. […] Estuvo descacharrante en el garrotín y superiorísima en el tango, en la farruca y en las malagueñas que bailó… a punta de pies” (El Mundo, 11-8-1909). (1)

Además de los bailes mencionados, La Malagueñita se atreve con las granaínas e incluso canta cuplés. Sus números son muy aplaudidos por el público, que la hace repetir algunos de ellos hasta en seis ocasiones.

En el mes de octubre, la revista Eco Artístico sitúa a Encarnación en el teatro Nacional de la capital cubana, “cosechando grandes aplausos” (25-10-1909). El diario insular El Mundo la sigue localizando allí durante los tres últimos meses de 1909. Como en anteriores ocasiones, la malagueña “recibe aplausos a granel en Actualidades” (8-10-1909), donde es “aclamada todas las noches” (18-10-1909), y continúa “sumando triunfos” (21-12-1909) en el Alhambra.

En primavera de 1910 volvemos a encontrar a la artista malagueña en México. Según informa el periódico cubano El Mundo, Encarnación “se ha convertido en corto tiempo en una de las artistas predilectas del público. La graciosa Malagueñita cosecha diarias ovaciones en la capital mexicana” (23-3-1910).

Amalia Molina (La Unión Ilustrada, 14-8-1910)

Amalia Molina (La Unión Ilustrada, 14-8-1910)

A finales de abril, la prensa local la sitúa en el teatro Alcázar, donde, además de subirse al escenario, junto a artistas como la sevillana Amalia Molina, también protagoniza uno de los filmes que se proyectan:

“En la función de tarde se exhibirá un escogidísimo programa de películas cinematográficas en el que figuran como obsequio una muy bien lograda de Encarnación ‘La Malagueñita’ ejecutando algunos de sus notables bailes españoles” (La Patria, 28-4-1910).

En el mes de junio, la bailaora española vuelve a salir en los papeles por un motivo bien distinto:

“Bailarina en peligro de muerte.
[…] María Encarnación Hurtado tomó una substancia tóxica por equivocación, en vez de una medicina que para la afección de la garganta le fue recetada, y estuvo a punto de morir envenenada. La asistió un médico a tiempo y logró salvarle la vida” (El Tiempo, 13-6-1910).

Unas semanas más tarde, ya recuperada, la española participa en una función a beneficio de la Sociedad de Autores que se celebra en el teatro María Guerrero de la capital mexicana. El programa se compone de piezas de revista, zarzuela, música y bailes, e incluye una actuación de “la bailarina y coupletista Encarnación Hurtado, ‘La Malagueñita’” (El Tiempo, 2-8-1910).

Poco después, la artista malagueña comparte escenario con el cantaor El Mochuelo en el teatro Colón.

“La actuación de esta tarde en el Colón, que comienza a las 3:30 p. m., comprenderá lo siguiente: ‘Basta de suegros’, ‘Los Bombones’ y ‘La cuerda floja’, y además habrá vodevil y cante por ‘El Mochuelo’, ‘La Malagueñita’ y E. Martínez. ‘El ama de casa’ se ofrecerá en la tanda de moda, a las 7 p. m., mientras que en la función de noche, que comienza a las 8:30, el programa será el siguiente: ‘Último capítulo’ y vodevil por ‘La Malagueñita’ y E. Martínez; ‘Francfort’ y cante flamenco por ‘El Mochuelo’: ‘Acciones de Adan’, y vodevil por ‘Malagueñita’ y E. Martínez, y ‘La criatura’, cante por ‘El Mochuelo’ y vodevil por ‘La Malagueñita’ y E. Martínez” (The Mexican Herald, 7-8-1910). (2)

Antonio Pozo, El Mochuelo (Foto publicada por M. Bohórquez en su blog La Gazapera)

Antonio Pozo, El Mochuelo (Foto publicada por M. Bohórquez en su blog La Gazapera)

Regreso triunfal a España

En los primeros meses de 1911, Encarnación ya está de vuelta en España. En el mes de febrero triunfa en el Alcázar Español de Barcelona, y después continúa cosechando éxitos en algunas ciudades andaluzas:

“ALCÁZAR.- Con extraordinario éxito, aclamada en todos sus bailes y canciones, viene deslizándose la actuación de la hermosa y elegante artista Encarnación Hurtado ‘La Malagueñita’, que reverdece sus infinitos laureles conquistados en su larga campaña por América” (Eco Artístico, 15-2-1911).

Sevilla. Salón Novedades.- […] La simpática bailarina La Malagueñita, es motivo también de prolongados aplausos. La Sala siempre llena, merced al sugestivo programa de Cohen y Malagueñita, dos estrellas de primera magnitud” (Eco Artístico, 23-3-1911).

Huelva. Teatro Mora.- […] La Malagueñita, cada día que pasa gustan más sus bailes, como así el difícil taconeado de ‘El inglés’ y ‘garrotín’, siendo justamente aplaudida” (Eco Artístico, 5-4-1911).

Posteriormente, se puede admirar el arte de Encarnación Hurtado en el teatro Gayarre de Barcelona y en el Trianón Palace de Madrid. En este último local debuta a finales de abril “la famosa ‘Malagueñita’, sobradamente conocida para necesitar previos elogios” (La Correspondencia de España, 23-4-1911).

La artista malagueña actúa durante varias semanas con “éxito extraordinario” (La Correspondencia de España, 26-4-1911). La prensa la presenta como una “verdadera notabilidad en sus bailes nacionales, creadora de tangos, farrucas y garrotines, que conquistan grandes aplausos de los amantes del arte clásico español” (La Correspondencia de España, 1-5-1911).


NOTAS:
(1) Todas las referencias de la prensa cubana han sido localizadas por José Luis Ortiz Nuevo y reproducidas por José Luis Navarro en el artículo “La Malagueñita en La Habana”, publicado en el blog ‘El Eco de la Memoria’.
(2) La traducción de todos los textos extranjeros es nuestra.


Encarnación ‘La Malagueñita’, salero y elegancia a partes iguales (I)

Si pensamos en bailaoras malagueñas, la primera que se nos viene a la mente es la genial Trinidad ‘La Cuenca’ (1857-1890), a quien en su día dedicamos varias entradas. Trinidad destacó por su baile típicamente masculino, que ejecutaba vestida de hombre, algo totalmente inusual en aquella época. El número que le dio fama internacional sin duda fue el baile del torero, que consistía en imitar, una por una, las distintas suertes del toreo.

Trinidad Cuenca (The National Police Gazette, New York, 28-7-1888)

Trinidad Cuenca (The National Police Gazette, Nueva York, 28-7-1888)

A principios del siglo XX empieza a conquistar los escenarios una paisana de La Cuenca, que adopta el nombre artístico de “La Malagueñita”, y que también sorprende por ser una de las primeras en ejecutar bailes típicamente masculinos, como la farruca o el garrotín, vestida con pantalones.

Las primeras referencias que encontramos sobre esta artista, llamda Encarnación Hurtado, aluden a su debut en el madrileño teatro de Novedades, el día 3 de enero de 1906. La prensa menciona a la artista como “Encarnación, la Malagueñita, bailadora gitana de tientos y tarantas” (Heraldo de Madrid, 1-1-1906) o “La Malagueñita, bailadora de tarantas” (La Época, 3-1-1906). En el cartel también figuran famosas cupletistas de la época, como La Fornarina o La Chelito.

Sin embargo, Encarnación no sólo destaca en el baile por tarantas. Unas semanas más tarde, en el mismo salón, se anuncia una nueva actuación de “la notable bailarina española ‘La Malagueñita’, que es una especialidad en las danzas orientales y en los bailes gitanos” (La Correspondencia de España, 26-2-1906).

Una brillante carrera en la España y Portugal

A finales de marzo, Encarnación Hurtado se presenta en el teatro de la Zarzuela, entre un nutrido elenco de artistas de variedades en el que también figura la Fornarina; y ya en el mes de abril marcha a Lisboa junto a la compañía de zarzuela cómica española, que debuta en el teatro de Doña Amelia. El cuerpo de baile lo completan las hermanas Esmeraldas, la Tarifeña y la Trianita.

Encarnación Hurtado, La Malagueñita (Eco Artístico, 6-5-1911)

Encarnación Hurtado, La Malagueñita (Eco Artístico, 6-5-1911)

Tras regresar a Madrid para protagonizar, junto a Pastora Imperio, el cuadro ‘Una fiesta andaluza’ sobre las tablas del Central Kursaal, La Malagueñita sigue actuando en la capital portuguesa, suponemos que con éxito, pues la presentación de la artista en el Salón Concert Actualidades madrileño, previsto para principios de julio, ha de posponerse debido a la ampliación del contrato de la artista en Lisboa:

“Salón Concert Actualidades.- […] iba a debutar otra artista también famosa. Es la singular bailarina ‘La Malagueñita’, creadora de los bailes gitanos La farruca y El garrotín, que debutará el día 2 del próximo julio” (Heraldo de Madrid, 29-6-1906).

“Salón Concert Actualidades.- […] El debut de la popular Malagueñita […] ha tenido que ser aplazado unos días, por haberle prorrogado el contrato la Empresa del teatro donde actúa ahora en Lisboa” (Heraldo de Madrid, 5-7-1906).

En el cartel del Actualidades también figuran artistas como La Argentina, Amparito Muñoz o Las Esmeraldas. La esperada presentación de La Malagueñita es todo un éxito:

“Salón Concert Actualidades.- Desde el jueves viene actuando allí una artista notabilísima, la bailaora andaluza Encarnación, la Malagueñita, creadora de los bailes gitanos La farruca y El garrotín, que popularizó ella en Madrid durante la pasada campaña de invierno, cuando tanto vuelo se dio al género de varietés.

La Malagueñita ha hecho una creación de los dos citados bailes.

Es la artista graciosa y esbelta, que ha sabido sorprender los secretos mágicos de la danza andaluza con toda su riqueza de cadencias y ritmos voluptuosos que la caracterizan.

En ninguno de sus movimientos hay asomos de obscenidad ni de mal gusto. Por el contrario, respira su meritísima labor en todos momentos un arte y una delicadeza, que hacen de la simpática bailadora la típica cultivadora del clásico baile gitano.

El público la aplaude con entusiasmo, y es lo mejorcito que hemos visto en aquél Salón” (Heraldo de Madrid, 15-7-1906).

Consuelo Bello Cano, la Fornarina

Consuelo Bello Cano, la Fornarina

En otoño de 1906, Encarnación Hurtado se presenta en locales como el Salón Variedades de Zaragoza o el Teatro Circo Barcelonés. En primavera de 1907 se puede ver en el Kursaal madrileño -donde “logró un buen éxito con sus bailes gitanos” (La Época, 1-4-1907)- y en el Teatro de Verano de Alicante a “‘La Malagueñita’, bailarina española graciosa en extremo, y con una flexibilidad y ‘movilidad’ de cintura ‘emocionantes’” (La Correspondencia de Alicante, 20-5-1907).

En este último coliseo coincide de nuevo con La Fornarina, así como con el cantaor Sebastián Muñoz, Gayarre chico, y el guitarrista Pascual Aguilar. Tanto la cupletista como la bailaora son muy apreciada por el público alicantino:

“Teatro de Verano. […] La inimitable cupletista ‘La Fornarina’ es delirantemente ovacionada por el público cada vez que sale a escena. […]

Aunque cultivando distinto género, pues una canta y la otra baila, La Malagueñita no le va en zaga a La Fornarina en gracia, simpatía y desenvoltura. Esta bella artista con sus graciosas genialidades y sus picarescas iniciativas es muy celebrada y aplaudida por el público” (El Graduador, 5-6-1907).

Tras el éxito cosechado en Alicante, La Malagueñita se presenta en el salón Novedades de Valencia, junto a distintas artistas de variedades como La Trigueñita o Bella Raquel.

Rumbo a Cuba

Unos meses más tarde, la prensa la sitúa en La Habana. La revista española El arte del teatro, en la sección dedicada a la capital cubana, publica las siguientes informaciones:

“Encarnación Hurtado ‘La Malagueñita’ es de todas las variedades de Payret la más atrayente, valiosa y aplaudida. Bajita, delgada, trigueña, simpática, con mucho donaire y mucha sal, ejecuta sus números coreográficos con bastante acierto” (12-1-1908). (1)

“En Payret, Martí y Actualidades, que se ven favorecidos por numerosísimo público, triunfan los Ash, notabilísimos bailarines, La Malagueñita, la Españolita, Coralito, Toreski, la Monterde y Conchita Soler” (1-2-1908).

La Malagueñita (Mundo Ilustrado, 22-8-1909; foto publicada por J.L. Navarro en el blog El eco de la memoria)

La Malagueñita (Mundo Ilustrado, 22-8-1909; foto publicada por J.L. Navarro en el blog El eco de la memoria)

A partir del mes de junio, Encarnación pasa al teatro Albisu, también en La Habana. La prensa local destaca sus buenas cualidades para el baile flamenco, que la hacen cosechar abundantes aplausos. Veamos algunos de los elogios que le dedica el diario El Mundo (2):

“Es La Malagueñita una bailarina de excelente estilo y mucha agilidad y que conoce al dedillo todos los bailes españoles” (El Mundo, 8-6-1908).

“La Malagueñita, que hace esculturas al minuto con su propia carne […] se arrancó anoche por todo lo alto y todo lo bajo en Albisu bailándose unas cositas flamencas de mucho arrastre […].

La Malagueñita sabe dónde le aprieta el compás y, como es garbosa a más no poder, se mete en las entretelas del corazón del público que no se cansa de aplaudirla” (El Mundo, 9-6-1908).

“En Albisu recogió palmas y celebraciones ayer La Malagueñita que no se deja echar la zancadilla por nadie en lo atañadero a dar al Tango lo suyo” (El Mundo, 10-6-1908).


NOTAS:
(1) Referencia aportada por José Luis Navarro en su artículo “La Malagueñita en La Habana”, publicado en el blog ‘El Eco de la Memoria’. Según el autor, tanto ésta como el resto de referencias que presenta, extraídas del diario cubano El Mundo, se deben a José Luis Ortiz Nuevo.
(2) Todas las referencias de la prensa cubana han sido localizadas por José Luis Ortiz Nuevo y reproducidas por José Luis Navarro en el artículo antes mencionado.